Nuestro mercado cada año tiene uno o dos meses en los que domina la apatía, dichos meses son diferentes cada año. Es como si el mercado se tomase un respiro para recuperar fuerzas y centrar las posibles posiciones para seguir adelante pero, según mi experiencia, lo de este mes de septiembre supera todos mis recuerdos.
Estamos en el comienzo de la campaña de maíz, con sus tensiones, dependiendo de si llueve o no, es decir, si se puede cosechar o no y pendientes de las existencias en los puertos. Pues el mercado ni respira, a pesar de algunos problemas con el maíz de puerto en Tarragona y a pesar de las lluvias que han frenado y retrasado algo la cosecha. Lo que en otro momento hubiese sido un drama, esta vez ni se ha notado.
Por otra parte, en septiembre, la cebada y el trigo nacional ya están en los almacenes, o lo que es lo mismo, ya no hay mercancía en las eras. Por lo tanto, históricamente hablando, se supone que deberían subir los precios. Pues mira tú por donde que este año, no tan sólo no se ha conseguido, sino que estamos como en plena cosecha e incluso por debajo. Entiendo que eso se debe a las ofertas en los puertos, tanto de cebada como de trigo, y a las ofertas de Francia, sobre todo si no exigimos calidad; lo cierto es que por una cosa u por otra los precios están ahí inamovibles e inmutables.
A todo ello se ha de añadir que los informes del USDA y otros, son planos o ligeramente bajistas y cuando la realidad no es así, o sea resulta ser ligeramente alcista, el mercado no se lo cree y vuelve donde estaba.
Concretando, los precios están donde estaban:
- Trigo en puerto entre los 160-165 €/Tm, dependiendo de las posiciones y del momento. Los disponibles operan por debajo. Los precios destino están por debajo, sobre 164-166 €/Tm, pero sólo los inmediatos.
- El maíz se cotiza entre 165-170 €/Tm dependiendo de las posiciones en los puertos. En destino los inmediatos sobre los 174 €/Tm, aunque el mercado compra sólo lo imprescindible y espera que, a medida que avance la cosecha, los precios tiendan a la baja.
- En cuanto a la cebada, se sitúa en puerto y hasta diciembre sobre 153 €/Tm y la nacional para entregas inmediatas sobre los 154 €/Tm destino.
- Además de todo esto, siguen habiendo ofertas de triticale sobre los 156 €/Tm en puerto para una posición de oct/dic y centeno a 147 €/Tm puerto para sep/nov. En definitiva, hay de todo y a precios razonables.
Y entonces, ¿por qué el comprador se mantiene al margen? A mi entender principalmente por dos motivos: el primero ya ha tomado posiciones y por lo tanto se siente cómodo; el segundo es que ante la indefinición del mercado espera a ver por dónde se decanta. Eso no quiere decir que cada vez que se tocan precios mínimos no entre, pero lo hace de manera escalonada y sin que se note demasiado en el mercado.
¿Y las proteínas? Más de lo mismo. Hace un mes todo el mundo habría comprado soja a 330 €/Tm, para ahora o para el año 2017. Se ha llegado a esos niveles y los intereses de compra han bajado a 325 €/Tm o 320 €/Tm, y son muchos los que creen que llegaremos a los mínimos que se operaron en febrero, o sea los 300 €/Tm e incluso algo por debajo.
Resumiendo, que mucho hablar pero poco operar. Las colzas siguen en 220 €/Tm y se ha operado algo por debajo, pero en cantidades no significativas y para disponibles, la torta de girasol sobre los 214 €/Tm para disponibles y 200 €/Tm para la posición de oct/dic. Y finalmente el girasol de alta, euro arriba o euro abajo, al mismo precio que la torta.
En definitiva, un mercado apático y sin ideas claras, a la espera de que las cosas se definan, aunque a día de hoy nadie le ve el final y el comprador tiene la sensación que, de momento, nada se le está escapando y por lo tanto espera.
Finalmente informaros que este es mi último artículo ya que, a partir de este mes y después de 36 años en el sector, he decidido pasar a formar parte de uno de los clubs más numerosos de este país, el de los jubilados. Son muchos los artículos escritos pero todo tiene un final.
Sólo me queda agradecer a todo el equipo de 3tres3 su apoyo durante todo este tiempo de colaboración, al patrocinador Elanco por haber confiado en mí, y a vosotros como lectores, agradeceros la confianza depositada en mis artículos. ¡Muchas gracias y hasta pronto!